La historia del Comodoro Luis Py
Se embarcó rumbo a Argentina cuando era muy joven y en 1843, con 24 años, ingresó como subteniente al servicio de la Armada.
Estuvo bajo el mando de reconocidos almirantes, como Guillermo Brown.
Sus superiores lo describían como un hombre “valiente, sereno, honrado, amigo de los hombres libres, de moral y conducta intachable”.
En 1864, a sus 46 años, le fue otorgado el grado de Teniente Coronel, bajo el cual se desempeñó en la guerra del Paraguay.
Estando a bordo del vapor Guardia Nacional, participó el 12 de agosto de 1865 en la recordada batalla de Las Cuevas en las que el barco logró acallar las baterías paraguayas que disparaban desde aquel punto.
Entre los quince muertos que ocasionaron los disparos, se encontraba su hijo, el guardamarina Enrique Py.
En 1868, a sus 49 años, ascendió a Coronel e intervino nuevamente en la guerra del Paraguay, hasta su culminación.
A fines de 1871, el coronel Py pasó a desempañar las funciones de jefe de la isla Martín García.
Entre 1876 y 1877, por la mala situación financiera del país, una escuadra de buques fue puesta en desarme, pasando a estar amarrados en Zárate y el Río Luján. Todos los buques quedaron a las órdenes de Py.
Por entonces, se inició un incendio en uno de los buques teniendo Py una actuación distinguida en la extinción del fuego y en la salvación de los demás buques allí amarrados.
En 1878, llegó a Buenos Aires un telegrama informando que en mares del sur, una cañonera Chilena había capturado una embarcación que se encontraba extrayendo guano en la isla de Los Leones, cercana a las Malvinas.
A pesar de contar con el permiso de las autoridades argentinas, la barca había sido remolcada por la armada de Chile hasta Punta Arenas.
Fue entonces que el gobierno argentino dispuso la ocupación militar de Santa Cruz y a cargo de la insignia “Los Andes” designó al Coronel Py, quien aceptó sin titubear la honrosa misión.
Antes de partir rumbo al Sur, en noviembre de 1878 desde Puerto de Patagones, Luis Py ordenó a su tripulación: “Estamos pronto a zarpar en el desempeño de un misión delicada del Gobierno de la Nación, es menester que para lograr el buen éxito de ella, reine la más severa disciplina y la más perfecta armonía entre todos. El patriotismo y el deber militar nos lo impone, y espero que sin esfuerzo alguno será cumplido por todos y cada uno de vosotros”. Firma: “Vuestro jefe y amigo, Luis Py”.
Por su actuación en aquella misión, el 9 de julio de 1880, a los 61 años, ascendió al cargo de Comodoro.
Cuatro años después, cuando ocupaba el cargo de jefe de la Dirección General de Talleres y Arsenales de Marina, en plena función, el 22 de febrero de 1884, a los 65 años falleció víctima de un ataque cerebral. El diario La Prensa despidió a Py con justas palabras: “Los marinos jóvenes deben conservar siempre la memoria del Comodoro Py y si aprenden a imitar sus virtudes, serán valientes, honrados y dignos”.
0 comentarios:
Publicar un comentario